El presidente Montilla vuelve a defender a capa y espada la constitucionalidad del Estatuto de Cataluña y a solicitar el apoyo de instituciones y entidades.
Montilla olvida que estamos en un estado de derecho, cuando llama a los ciudadanos a no respetar las leyes y a sublevarse contra una posible sentencia del TC, que no sea de su gusto.
Sr. Montilla parece que Vd. olvida la máxima “homo hominis lupus” (Plauto, Hubbes) y con su misiva llamando a la subversión, en esa faceta suya de agitador social, olvida que los agitadores sociales acaban siendo devorados por el propio monstruo que han creado para obtener sus fines.
Déjese Vd. de quimeras, solicitando adhesiones al famoso editorial de la dignidad de Cataluña, olvidando que son las personas las que tienen dignidad y no los territorios.
Baje de su nube, en Cataluña tenemos problemas reales que afectan a los ciudadanos y que no tienen nada que ver con el grado de autogobierno que Vd. quiera conseguir para Cataluña. Preocúpese por el desempleo, la crisis, fomente medidas sociales para paliar la pérdida de nivel adquisitivo de muchas familias que están siendo desahuciadas por no poder hacer frente a sus deudas.
Cataluña tiene vive una grave crisis económica, social y política. Es la comunidad donde se está destruyendo más empleo, han aumentado el número de expedientes de regulación, hay más concursos de acreedores y más quiebras.
Corresponde a usted y a sus socios de Gobierno, proponer medidas para paliar la crisis, gestionando correctamente los impuestos que se recaudan aquí y los fondos que Vd. ha conseguido del resto del estado Español para Cataluña.
Tiene Vd. una cita electoral en este mismo año, los ciudadanos que residen en nuestra comunidad autónoma pasaran cuentas y deben decidir a quién entregan las riendas del gobierno para los próximos cuatro años. Acuérdese Sr. Montilla que el pueblo es soberano y cada vez suena más fuerte una voz entre la gente: Váyase Sr. Montilla.
LA RAZON-Las cifras les dan la razón. Sólo en 2008, la Generalitat recaudó 208.200 euros en sanciones a 209 comercios que no tenían sus rótulos en catalán. Un año antes, la recaudación por este concepto fue de 138.150 euros por un total de 138 infracciones. Ante la tendencia alcista de las multas que establece la Ley de política lingüística por no rotular los establecimientos en catalán, comerciantes y partidos políticos han dicho basta.Este mediodía mostrarán su oposición a esta política lingüística en una manifestación convocada en Arenys de Mar, localidad donde tiene su establecimiento Xurde Rocamundi. Convoca la plataforma «Por una Cataluña en libertad. No a las multas lingüísticas», que está formada por PP, Ciutadans, UPyD, Ágora Socialista, la Asociación por la Tolerancia e Impulso ciudadano.La Ley de política lingüística fue aprobada por el gobierno de CiU en 1998, pero las sanciones a los comercios no comenzaron a aplicarse hasta el año 2002.
