miércoles, 21 de octubre de 2009

HACIA UN ESTADO RESIDUAL


La prensa recoge unas declaraciones en las que el secretario general adjunto de CIU, Felip Puig, califica los Presupuestos Generales del Estado para 2.010 de anticatalanes y antieconómicos y dice además que no respetan el Estatuto.
Dice esto en una jornada sobre el estado de las infraestructuras que se llevan a cabo en el Prat.
Precisamente los trabajadores de la planta de la Seda en El Prat, estudian movilizarse al no haber cobrado las nóminas. Supongo que a Felip Puig, no le parecerá anticatalán el preocuparse por la posible reducción de plantilla de la Seda en unas 300 personas.
Esos son los problemas reales que preocupan al ciudadano.
Lo que sí son estos presupuestos es inútiles para afrontar la crisis económica, política y social que sufre España, como ha dicho Rosa Díez.
En cuanto a que no respetan el Estatuto, yo más bien diría que no respetan un equilibrio justo entre lo que recauda el Estado y lo que reciben los ciudadanos.
Una gran parte de los ingresos públicos, va a parar a las Comunidades Autónomas, según negocian unas u otras.
Aquí está es la trampa, cualquier Gobierno, sea del color que sea, ha de ceder a las demandas de los partidos nacionalistas.
Este no es un invento de Zapatero, pero parece ser que nuestro Presidente no tiene fin a la hora de aprobar medidas que dejan al Estado sin recursos para llevar a cabo sus políticas.
Este sistema de cambalache político, no puede llevar más que a un Estado inoperante e incapaz de administrar a todos los Españoles de una forma justa e igualitaria.
Lo que necesitamos es una política presupuestaria austera, pensando en los momentos de crisis que estamos viviendo. Necesitamos dejarnos de cesiones a unas minorías, para centrarnos en objetivos que beneficien a todos los Españoles.
En definitiva, menos negociación bilateral entre Estado y Comunidades Autónomas y más visión de país.

María Brosed Flores
Portavoz de Unión Progreso y Democracia en Cataluña

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